Descripción
Piel suave como una rosa
El aceite esencial de rosa está indicado para hidratar pieles secas ya que aporta suavidad y restaura la elasticidad de la piel. También añade un extra de nutrición mientras la regenera y la rejuvenece.
Las pieles sensibles afectadas por rosácea también se ven favorecidas con el tratamiento calmante a base de aceite de rosa, y alivia los problemas dermatológicos de los cutis con tendencia acneica.
Ampliamente utilizado en cosmética por sus variadas propiedades, es un aliado para ayudarnos a afinar las estrías y a reducir las cicatrices o pequeñas marcas de la piel.
De hecho, se considera un potente regenerador de la piel.
La relajación florece
A nivel emocional, el aceite esencial de rosa tiene propiedades relajantes y calmantes que nos ayudan a gestionar los episodios de ansiedad, el cansancio nervioso y el estrés.
El masaje terapéutico profesional potenciado con el aroma a rosas alivia la tensión nerviosa y mejora visiblemente el estado de ánimo.
El aceite de rosa constituye un apoyo femenino en la normalización y el equilibrio del sistema hormonal, y en la reducción de las molestias menstruales.
Sus propiedades analgésicas alivian los dolores de cabeza y las molestias estomacales, además de favorecer el sistema circulatorio y linfático.
El espíritu de la femineidad
La rosa es el símbolo por excelencia de la energía femenina debido a su sensualidad. El aceite esencial de rosa es un estimulante natural que nos ayuda a recuperar y potenciar la libido en momentos de mayor decaimiento y poca vitalidad.
Equilibra el sistema energético con sentimientos de compasión, cordialidad y, nos ayuda a desarrollar un sentimiento de amor por todo lo que nos rodea.
El aceite de rosa serena las tensiones y desbloquea los conflictos internos, lo que nos proporciona una sensación de bienestar unida a la felicidad interior.
La rosa aporta seguridad estimulando la sabiduría femenina.